Ante todo, en mi opinión Interstellar (Christopher Nolan, 2014) es una película impecablemente realizada, donde destaca la banda sonora de Hans Zimmer y el espectacular sonido por encima de otros aspectos técnicos y artísticos igualmente muy bien resueltos.
Excepto por algunos recursos dramáticos muy previsibles, y otros risibles -como la pretenciosa y ridícula intención de relacionar el amor con la teoría de la relatividad- la historia se deja ver muy bien a pesar de sus casi tres horas de metraje.
Pero no me centraré en sus aspectos cinematográficos ni científicos -algunos han puesto en duda su rigor astrofísico- sino en los elementos propagandísticos del film, que prácticamente lo ponen a la altura de la saga Rambo ideológicamente hablando. Y de forma mucho más peligrosa, por lo relativamente sutil. El diario "Los Angeles Times", por ejemplo, opina que la película ofrece una imagen muy positiva para EEUU. A confesión de partes...
Quienes no la hayan visto no teman seguir leyendo: no arruinaré ninguna sorpresa del argumento en este artículo.
Decir que la película es una descarada oda a la NASA es quedarse corto. Que dediquen un diálogo completo a desmentir las teorías que afirman que el alunizaje de Apollo 11 fue un montaje para arruinar a la Unión Soviética es ya de por sí sintomático (y lo gratuito de la escena provoca creer que efectivamente fue así). Innumerables son las menciones que hay en el metraje a la “encomiable” labor de la agencia espacial estadounidense, punta de lanza del progreso de la humanidad, a pesar de la ocasional incompresión de la opinión pública por el elevado costo de sus misiones espaciales.
El punto de partida del film es que el Planeta Tierra, al parecer “espontáneamente”, se ha vuelto inhabitable y no queda más remedio que abandonarlo. Poca o ninguna mención al motivo de esta desgracia “natural”, quedando el hombre y sus actividades exentos de toda responsabilidad, y no digamos el capitalismo. El Hombre es la víctima y la Naturaleza el verdugo, y no al revés. La Tierra “ya no sirve” -quién sabe por qué, son “cosas que pasan”- y no queda más remedio que acudir a la NASA para que nos busque otro planeta donde vivir (y al que posteriormente poder contaminar hasta volverlo inhóspito, se entiende).
Como en toda producción de Hollywood, la bandera de las barras y estrellas aparece en numerosos planos. Interstellar no es la excepción, con el añadido de que irrumpe en pantalla de manera constante, y el agravante de que el film se centra en “salvar a la Humanidad”, pero no aparece ni un solo personaje que no sea de nacionalidad estadounidense. Ni uno. Al parecer la importancia de mantener las misiones espaciales no es tanto por el bien de la raza humana, sino por el bien del país que más ha hecho por exterminarla.
Detrás de su impecable factura técnica y artística, de su pedagogía científica y de su vibrante desarrollo dramático, la moraleja de la película queda resumida a que este planeta está dando sus últimas bocanadas de aire y no existen responsables a los que culpar, no hay esperanza de salvarlo así que podemos terminar de destruirlo sin sentir remordimientos, y la única salida a este panorama desolador es permitir que los científicos estadounidenses salven... a los estadounidenses.
Dicen que desmontar las películas de Hollywood es una excelente forma de averiguar en qué piensa y qué planea hacer en el corto o mediano plazo el estamento político-militar que gobierna Estados Unidos. En el caso de Interstellar las conclusiones a las que podemos llegar son mucho, mucho más sencillas de obtener que la teoría de la relatividad de Einstein. E infinitamente más preocupantes.
domingo, enero 18, 2015
domingo, noviembre 16, 2014
"Chino y Nacho": ¿Tolerancia o coherencia?
En los últimos días en las redes sociales se vive una polémica en torno al festival de música 'Suena Caracas', que agrupará a 137 bandas entre el 28 de noviembre y el 6 de diciembre en la ciudad capital. La polémica consistió en que muchísimos simpatizantes, militantes y defensores de la Revolución Bolivariana -entre los que me incluyo- criticaron la participación del dúo Chino y Nacho en ese evento, fundamentalmente por la postura que dicha agrupación musical mantuvo sobre uno de los episodios más difíciles y dolorosos que nos ha tocado sufrir en los últimos años: las guarimbas que se iniciaron en febrero de 2014 y se mantuvieron por dos o tres meses, causando decenas de muertos, heridos y múltiples daños a la propiedad pública.
Durante esos días, igual que otras personalidades nacionales e internacionales, Chino y Nacho mostraron públicamente su simpatía por un movimiento facho que, disfrazado de "estudiantes", pretendía derrocar un gobierno legítimamente electo, hostigó a famosos y no famosos solo por el hecho de ser chavistas, degolló motorizados, etc.
Muchos chavistas -entre los que me vuelvo a incluir- encontraron contradictorio que el gobierno contrate a una banda que apoyó lo que oficialmente el propio gobierno calificó y aún califica como "golpe de estado fascista". Inmediatamente las redes sociales se llenaron de críticas al respecto, y durante dos días no hubo respuesta oficial al asunto por parte de los responsables del evento. Hasta que por fin...
Desde su cuenta en twitter, el camarada alcalde Jorge Rodríguez, y con él muchos defensores de la contratación de Chino y Nacho, argumentaron que no había que ser intolerante, que la Revolución es inclusión, que aquí cabemos todos, e incluso hubo insinuaciones por parte de algunos voceros de que quienes criticaban la medida tenían actitudes propias de la derecha fascista.
Lejos de aplacar los ánimos, la explicación oficial generó múltiples respuestas reafirmándose en las críticas, y surgieron innumerables parodias de los argumentos expuestos, algunas de ellas muy divertidas.
Quienes criticamos la medida lo hacemos exigiendo coherencia por parte de las autoridades. Si decimos que lo que ocurrió a principios de año fue un golpe de estado fascista -personalmente así lo creo y no conozco ningún vocero oficial u oficioso del chavismo que contradiga esa versión- contratar a alguien que apoyó dicho ataque es totalmente incoherente. Yo no imagino al Centro Simón Wiesenthal invitando a una banda neonazi a tocar en un evento organizado por ellos, y dudo que Martin Luther King hubiera contratado a unas porristas del Ku Klux Klan para encabezar la histórica marcha por los derechos civiles. Y no lo habrían hecho no porque fueran intolerantes, sino por una mínima cuestión de coherencia y credibilidad en lo que profesan o defienden.
La mayoría de quienes criticamos a Chino y Nacho y su contratación no pedimos que en el evento sólo participen megarevolucionarios ultrachavistas. De hecho ese no es el caso de casi ninguna banda, sin que haya críticas mordaces por ello: eso sí es muestra de tolerancia, invitar a compartir contigo a quien no piensa igual que tú.
Pero una cosa es ser tolerante con la diferencia y otra muy distinta ser tolerante con el fascismo o con quienes lo apoyan. Porque eso es muestra de debilidad o de incoherencia, o de ambas a la vez, nunca de tolerancia.
Así que no se trata de ser o no ser tolerante, sino de ser tolerante, pero sin perder la coherencia.
Durante esos días, igual que otras personalidades nacionales e internacionales, Chino y Nacho mostraron públicamente su simpatía por un movimiento facho que, disfrazado de "estudiantes", pretendía derrocar un gobierno legítimamente electo, hostigó a famosos y no famosos solo por el hecho de ser chavistas, degolló motorizados, etc.
Muchos chavistas -entre los que me vuelvo a incluir- encontraron contradictorio que el gobierno contrate a una banda que apoyó lo que oficialmente el propio gobierno calificó y aún califica como "golpe de estado fascista". Inmediatamente las redes sociales se llenaron de críticas al respecto, y durante dos días no hubo respuesta oficial al asunto por parte de los responsables del evento. Hasta que por fin...
Desde su cuenta en twitter, el camarada alcalde Jorge Rodríguez, y con él muchos defensores de la contratación de Chino y Nacho, argumentaron que no había que ser intolerante, que la Revolución es inclusión, que aquí cabemos todos, e incluso hubo insinuaciones por parte de algunos voceros de que quienes criticaban la medida tenían actitudes propias de la derecha fascista.
Lejos de aplacar los ánimos, la explicación oficial generó múltiples respuestas reafirmándose en las críticas, y surgieron innumerables parodias de los argumentos expuestos, algunas de ellas muy divertidas.
Quienes criticamos la medida lo hacemos exigiendo coherencia por parte de las autoridades. Si decimos que lo que ocurrió a principios de año fue un golpe de estado fascista -personalmente así lo creo y no conozco ningún vocero oficial u oficioso del chavismo que contradiga esa versión- contratar a alguien que apoyó dicho ataque es totalmente incoherente. Yo no imagino al Centro Simón Wiesenthal invitando a una banda neonazi a tocar en un evento organizado por ellos, y dudo que Martin Luther King hubiera contratado a unas porristas del Ku Klux Klan para encabezar la histórica marcha por los derechos civiles. Y no lo habrían hecho no porque fueran intolerantes, sino por una mínima cuestión de coherencia y credibilidad en lo que profesan o defienden.
La mayoría de quienes criticamos a Chino y Nacho y su contratación no pedimos que en el evento sólo participen megarevolucionarios ultrachavistas. De hecho ese no es el caso de casi ninguna banda, sin que haya críticas mordaces por ello: eso sí es muestra de tolerancia, invitar a compartir contigo a quien no piensa igual que tú.
Pero una cosa es ser tolerante con la diferencia y otra muy distinta ser tolerante con el fascismo o con quienes lo apoyan. Porque eso es muestra de debilidad o de incoherencia, o de ambas a la vez, nunca de tolerancia.
Así que no se trata de ser o no ser tolerante, sino de ser tolerante, pero sin perder la coherencia.
sábado, marzo 29, 2014
Pero entonces... ¿cuántos bolívares vale un dólar?
Desde el 24 de marzo, cuando arrancó el sistema de asignación de divisas SICAD II, los opositores salieron a propagar por las redes sociales y programas de radio y televisión, que el nuevo valor oficial del dólar en Venezuela es de 51 Bs. Inmediatamente después, basándose en esa cifra como única referencia cambiaria, comenzaron a chillar que tenemos el peor salario del mundo, que de la noche a la mañana pasamos a ser más pobres que el indigente más mísero de todo el Planeta Tierra, que vienen tiempos de hambre, sed y enfermedades venéreas hasta ahora desconocidas, etc etc etc. Lo habitual en estos casos.
Pero no, por muy duro que chillen el dólar en Venezuela no vale 51Bs, ni lo que determine el SICAD II cada semana.
Tampoco sería correcto decir que el dólar en Venezuela vale los 6,30Bs de CENCOEX (conocido popularmente como 'dólar preferencial', y con el que se importan artículos de primera necesidad como alimentos o medicinas), ni que su valor es el asignado por SICAD I (10,80Bs destinados fundamentalmente para la importación de otros bienes de menor necesidad, así como cupos para viajeros e internet).
Entonces, ¿si tuviéramos que definir el valor del dólar mediante una cifra y sólo una cifra, cuál sería? ¿Cómo calcularla? Porque si compro un pollo importado, el dólar vale 6,30Bs, si compro una franela importada a través de SICAD I, el dólar vale 10,80Bs, y si compro un videojuego que una empresa importó usando divisas a través de SICAD II, el dólar vale unos 51Bs a día de hoy.
¿Será que el valor más aproximado del dólar en Venezuela es la media de esos tres, es decir (6,30Bs + 10,80Bs + 51Bs) dividido entre 3, lo que arroja un resultado de unos 23Bs? Tampoco, ese resultado sólo sería válido si la cantidad de dólares entregados a través de CENCOEX, SICAD I y II fueran exactamente iguales, lo que no es el caso.
Es decir, si en Venezuela se invirtiera la misma cantidad de dólares en importar pollos, franelas y videojuegos, el cálculo anterior -media artimética- sería correcto. Pero no lo es, porque se invierten más dólares en importar pollos que franelas, y más dólares en importar franelas que videojuegos. ¿Entonces?
Qué peo. Afortunadamente en estos casos podemos apoyarnos en nuestra buena amiga la ponderación (frase nerd donde las haya).
La ponderación es una herramienta matemática que nos permite obtener un promedio cuando las muestras no tienen el mismo peso, como es este caso en el que se invierten más dólares en importar pollos (CENCOEX) que franelas (SICAD I) y videojuegos (SICAD II).
Según datos ofrecidos por el BCV, aproximadamente el 80% de los dólares se asignan a través de CENCOEX, el 12% a través de SICAD I y apenas el 8% a través de SICAD II. Estos son los datos que nos servirán para ponderar y hallar el resultado que buscamos.
Es decir, de cada millón de dólares asignados, 800.000 (el 80%) se asignan a través de CENCOEX, 120.000 (el 12%) a través de SICAD I, y 80.000 (el 8% restante), a través de SICAD II. Con esos datos, podemos calcular cuántos bolívares son equivalentes a ese millón de dólares, porque tenemos las tasas de CENCOEX (fija de 6,30Bs), SICAD I (fija de 10,80Bs) y SICAD II (variable cada semana, a día de hoy aproximadamente 51Bs).
(CENCOEX) 800.000 dólares a 6,30Bs cada uno = 5.040.000Bs
(SICAD I) 120.000 dólares a 10,80Bs cada uno = 1.296.000Bs
(SICAD II) 80.000 dólares a 51Bs cada uno = 4.080.000Bs
_____________________________________________________
(TOTAL) 1.000.000 de dólares = 10.416.000Bs
O dicho de otra forma, para la obtención de ese millón de dólares que usamos como ejemplo -proporcional a la distribución real de divisas entre los tres sistemas de cambio- fueron necesarios 10.416.000Bs, es decir -redondeando- 10,42Bs por dólar. Ni 6,30Bs ni 10,80Bs ni muchísimo menos 51Bs.
En este ejemplo, válido para el momento en que escribí esta nota (29 de marzo de 2014) el valor ponderado del dólar en Venezuela es entonces de 10,42Bs por dólares.
El anterior cálculo se puede expresar de forma porcentual, más general, sin importar la cantidad de dólares, del siguiente modo:
(CENCOEX) 80% de cada dólar a 6,30Bs = 5,04Bs
(SICAD I) 12% de cada dólar a 10,80Bs = 1,30Bs
(SICAD II) 8% de cada dólar a 51Bs = 4,08Bs
_____________________________________________________
(TOTAL) Un dólar ponderado = 10.42Bs
Estos datos son para el valor aproximado del dólar SICAD II a día de hoy, como expliqué antes. ¿Y qué pasa si el dólar SICAD II se dispara o se desploma la próxima semana, o la de arriba? ¿Cuál sería el valor ponderado del dólar en ese caso?
No hay problema. La fórmula general* para obtener el valor ponderado del dólar en cualquier momento y mientras rijan estos tres tipos de cambio es:
Esta es la forma de calcular el valor de referencia del dólar en Venezuela, y no otra, la forma que combina los tres tipos de cambio según su participación proporcional en el mercado de divisas. Es decir, un cálculo ponderado.
Por cierto, en nuestro idioma, una persona ponderada es aquella que procede con tacto y prudencia. Sin manipular para generar angustia, sin deformar intencionadamente la realidad con fines politiqueros.
Y si las afirmaciones de los voceros y militantes opositores fueran más serias, justas y demostrables, en fin, más ponderadas, seguro que existiría un diálogo más constructivo en el país.
----------------------------------------------
*La fórmula expresa los porcentajes de 80%, 12% y 8% correpondientes a las tres tasas de cambio en forma de "tantos por uno". Cualquiera de las dos formas de calcular el promedio ponderado arroja el mismo resultado.
Pero no, por muy duro que chillen el dólar en Venezuela no vale 51Bs, ni lo que determine el SICAD II cada semana.
Tampoco sería correcto decir que el dólar en Venezuela vale los 6,30Bs de CENCOEX (conocido popularmente como 'dólar preferencial', y con el que se importan artículos de primera necesidad como alimentos o medicinas), ni que su valor es el asignado por SICAD I (10,80Bs destinados fundamentalmente para la importación de otros bienes de menor necesidad, así como cupos para viajeros e internet).
Entonces, ¿si tuviéramos que definir el valor del dólar mediante una cifra y sólo una cifra, cuál sería? ¿Cómo calcularla? Porque si compro un pollo importado, el dólar vale 6,30Bs, si compro una franela importada a través de SICAD I, el dólar vale 10,80Bs, y si compro un videojuego que una empresa importó usando divisas a través de SICAD II, el dólar vale unos 51Bs a día de hoy.
¿Será que el valor más aproximado del dólar en Venezuela es la media de esos tres, es decir (6,30Bs + 10,80Bs + 51Bs) dividido entre 3, lo que arroja un resultado de unos 23Bs? Tampoco, ese resultado sólo sería válido si la cantidad de dólares entregados a través de CENCOEX, SICAD I y II fueran exactamente iguales, lo que no es el caso.
Es decir, si en Venezuela se invirtiera la misma cantidad de dólares en importar pollos, franelas y videojuegos, el cálculo anterior -media artimética- sería correcto. Pero no lo es, porque se invierten más dólares en importar pollos que franelas, y más dólares en importar franelas que videojuegos. ¿Entonces?
Qué peo. Afortunadamente en estos casos podemos apoyarnos en nuestra buena amiga la ponderación (frase nerd donde las haya).
La ponderación es una herramienta matemática que nos permite obtener un promedio cuando las muestras no tienen el mismo peso, como es este caso en el que se invierten más dólares en importar pollos (CENCOEX) que franelas (SICAD I) y videojuegos (SICAD II).
Según datos ofrecidos por el BCV, aproximadamente el 80% de los dólares se asignan a través de CENCOEX, el 12% a través de SICAD I y apenas el 8% a través de SICAD II. Estos son los datos que nos servirán para ponderar y hallar el resultado que buscamos.
Es decir, de cada millón de dólares asignados, 800.000 (el 80%) se asignan a través de CENCOEX, 120.000 (el 12%) a través de SICAD I, y 80.000 (el 8% restante), a través de SICAD II. Con esos datos, podemos calcular cuántos bolívares son equivalentes a ese millón de dólares, porque tenemos las tasas de CENCOEX (fija de 6,30Bs), SICAD I (fija de 10,80Bs) y SICAD II (variable cada semana, a día de hoy aproximadamente 51Bs).
(CENCOEX) 800.000 dólares a 6,30Bs cada uno = 5.040.000Bs
(SICAD I) 120.000 dólares a 10,80Bs cada uno = 1.296.000Bs
(SICAD II) 80.000 dólares a 51Bs cada uno = 4.080.000Bs
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(TOTAL) 1.000.000 de dólares = 10.416.000Bs
O dicho de otra forma, para la obtención de ese millón de dólares que usamos como ejemplo -proporcional a la distribución real de divisas entre los tres sistemas de cambio- fueron necesarios 10.416.000Bs, es decir -redondeando- 10,42Bs por dólar. Ni 6,30Bs ni 10,80Bs ni muchísimo menos 51Bs.
En este ejemplo, válido para el momento en que escribí esta nota (29 de marzo de 2014) el valor ponderado del dólar en Venezuela es entonces de 10,42Bs por dólares.
El anterior cálculo se puede expresar de forma porcentual, más general, sin importar la cantidad de dólares, del siguiente modo:
(CENCOEX) 80% de cada dólar a 6,30Bs = 5,04Bs
(SICAD I) 12% de cada dólar a 10,80Bs = 1,30Bs
(SICAD II) 8% de cada dólar a 51Bs = 4,08Bs
_____________________________________________________
(TOTAL) Un dólar ponderado = 10.42Bs
Estos datos son para el valor aproximado del dólar SICAD II a día de hoy, como expliqué antes. ¿Y qué pasa si el dólar SICAD II se dispara o se desploma la próxima semana, o la de arriba? ¿Cuál sería el valor ponderado del dólar en ese caso?
No hay problema. La fórmula general* para obtener el valor ponderado del dólar en cualquier momento y mientras rijan estos tres tipos de cambio es:
6,30BS*0,8 + 10,80BS*0,12 + VALOR-SICAD-II-EN-BS*0,08
=
VALOR REFERENCIAL DEL DÓLAR
(PROMEDIO PONDERADO)
Esta es la forma de calcular el valor de referencia del dólar en Venezuela, y no otra, la forma que combina los tres tipos de cambio según su participación proporcional en el mercado de divisas. Es decir, un cálculo ponderado.
Por cierto, en nuestro idioma, una persona ponderada es aquella que procede con tacto y prudencia. Sin manipular para generar angustia, sin deformar intencionadamente la realidad con fines politiqueros.
Y si las afirmaciones de los voceros y militantes opositores fueran más serias, justas y demostrables, en fin, más ponderadas, seguro que existiría un diálogo más constructivo en el país.
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*La fórmula expresa los porcentajes de 80%, 12% y 8% correpondientes a las tres tasas de cambio en forma de "tantos por uno". Cualquiera de las dos formas de calcular el promedio ponderado arroja el mismo resultado.
(VIDEO) #PRAYFORVENEZUELA (si estos sifrifachos llegaran a tomar el poder)
Video que realicé parodiando otro que rodaba por las redes, donde se deformaba la realidad de las guarimbas y de manera velada se pedía una intervención extranjera. Le salía parodia -por manipuladores y apátridas- y eso hice.
Aquí está:
Aquí está:
domingo, marzo 02, 2014
Retrato de la oposición venezolana en dos videos
En estos dos videos que presento en esta entrada podrán observar el comportamiento de una parte de la oposición en estos agitados días. En el primero, observarán la falta de argumentos de la que adolecen, y su peculiar manera de entender la democracia. En el segundo, seguramente más impactante, contemplarán los grados de locura alcanzados en las urbanizaciones de clase media-alta, donde un grupo de vecinos opositores tranca las calles, quema basura y amontona escombros, para desesperación de sus vecinos, también opositores.
A continuación los dos videos:
A continuación los dos videos:
lunes, febrero 24, 2014
jueves, febrero 20, 2014
La parábola Zidane-Materazzi, o por qué no caer en provocaciones
En 2006, en la final del Mundial de fútbol de Alemania, que jugaron Francia e Italia, la estrella de la escuadra francesa, Zinedine Zidane, fue insultado por un defensa italiano, Materazzi, a pocos minutos del final del juego. Zidane, con todos los nervios de una final mundialista, volteó hacia Materazzi y le asestó un certero cabezazo. Con algo de teatro, Materazzi se llevó las manos al rostro y cayó al suelo retorciéndose de dolor. El árbitro, que observó la secuencia completa, no lo dudó y expulsó al mejor jugador francés desde Michel Platini. Con su mejor hombre fuera, Francia no pudo obrar el milagro e Italia terminó proclamándose campeona del mundo.
Materazzi, un defensa caimán y rústico, venció a Zidane, maestro y creador de algunas de las mejores jugadas de la historia del fútbol.
Hoy, en Venezuela, una ultraderecha desquiciada y enferma, nos está provocando a todas y todos quienes apoyamos la Revolución: además de insultarnos, destruye el transporte público, tranca las calles y arrasa todo a su paso, ataca a trabajadores, destruye plazas, y hace todo lo posible para incendiar el país.
A falta de ideas y frustrada por tantas derrotas, recurre al juego sucio, a la marramucia, a la patada malintencionada.
Algunos de nosotros quizá sintamos la tentación de devolverles el golpe. No se trata de dejarles hacer lo que les dé la gana, no: para eso están las fuerzas del orden. Pero el juego de la violencia es su juego, no el nuestro. No podemos caer en provocaciones. Como le pasó a Zidane.
¿Zidane tenía motivos para golpear a Materazzi? Sí, el jugador italiano lo insultó, y bien feo por cierto. ¿Se merecía un buen golpe Materazzi? Sin duda, por sucio, por antideportivo... por mamagüevo, si así lo prefieren. Ahora bien... ¿a qué iban los dos a esa final? ¿A ver quién golpeaba más duro a quién? No. Iban a ganarla, ¿verdad? ¿Y quién la ganó? El sucio, el antideportivo... el mamagüevo. De nada le sirvió a Zidane tener todos los motivos, toda la justificación, toda la razón del mundo para soltarle un vergajazo al otro, porque Materazzi se llevó su coñazo pero también se llevó la Copa del Mundo, que era lo que ambos fueron a buscar ese día.
Zidane se dejó provocar por Materazzi, y después de ahí, lo perdió todo. Aunque tuviera la razón, aunque fuera mejor jugador, aunque mereciera ganar.
Así que aunque tengamos la razón, aunque nos sobren los motivos, aunque nos indignemos ante la violencia de un grupo fascista de la oposición, no caigamos en provocaciones tomándonos la justicia por cuenta propia. Porque eso es lo que quieren, porque eso es lo que necesitan para llevar a cabo su sucio y antidemocrático plan.
Y no podemos perder la Revolución, que vale mucho, muchísimo más que una Copa del Mundo.
Materazzi, un defensa caimán y rústico, venció a Zidane, maestro y creador de algunas de las mejores jugadas de la historia del fútbol.
Hoy, en Venezuela, una ultraderecha desquiciada y enferma, nos está provocando a todas y todos quienes apoyamos la Revolución: además de insultarnos, destruye el transporte público, tranca las calles y arrasa todo a su paso, ataca a trabajadores, destruye plazas, y hace todo lo posible para incendiar el país.
A falta de ideas y frustrada por tantas derrotas, recurre al juego sucio, a la marramucia, a la patada malintencionada.
Algunos de nosotros quizá sintamos la tentación de devolverles el golpe. No se trata de dejarles hacer lo que les dé la gana, no: para eso están las fuerzas del orden. Pero el juego de la violencia es su juego, no el nuestro. No podemos caer en provocaciones. Como le pasó a Zidane.
¿Zidane tenía motivos para golpear a Materazzi? Sí, el jugador italiano lo insultó, y bien feo por cierto. ¿Se merecía un buen golpe Materazzi? Sin duda, por sucio, por antideportivo... por mamagüevo, si así lo prefieren. Ahora bien... ¿a qué iban los dos a esa final? ¿A ver quién golpeaba más duro a quién? No. Iban a ganarla, ¿verdad? ¿Y quién la ganó? El sucio, el antideportivo... el mamagüevo. De nada le sirvió a Zidane tener todos los motivos, toda la justificación, toda la razón del mundo para soltarle un vergajazo al otro, porque Materazzi se llevó su coñazo pero también se llevó la Copa del Mundo, que era lo que ambos fueron a buscar ese día.
Zidane se dejó provocar por Materazzi, y después de ahí, lo perdió todo. Aunque tuviera la razón, aunque fuera mejor jugador, aunque mereciera ganar.
Así que aunque tengamos la razón, aunque nos sobren los motivos, aunque nos indignemos ante la violencia de un grupo fascista de la oposición, no caigamos en provocaciones tomándonos la justicia por cuenta propia. Porque eso es lo que quieren, porque eso es lo que necesitan para llevar a cabo su sucio y antidemocrático plan.
Y no podemos perder la Revolución, que vale mucho, muchísimo más que una Copa del Mundo.
lunes, diciembre 16, 2013
2 de cada 3 venezolan@s viven en un municipio bolivariano
Desde las pasadas elecciones municipales venezolanas del 8 de diciembre, venía pensando en hacer un análisis similar al que hice en 2008: clasificar la población venezolana en base al signo político de las Municipios y Estados donde habita. Esa óptica nos permite ver, más allá del resultado en votos (que ganó la Revolución por más de un millón de votos de diferencia), la fuerza política real que tienen desde un punto de vista demográfico las diferentes opciones políticas.
Desde que se dieron los resultados oficiales, la oposición viene diciendo -y no es la primera vez que usan este débil argumento- que el gobierno ganó en más municipios, pero ellos ganaron donde vive más gente. ¿Qué tan cierto es esto? Es decir, después del resultado electoral del 8D ¿cuántas venezolanas y venezolanos viven en un municipio gobernado por la Revolución? ¿Y cuántos viven en municipios con alcaldías opositoras?
Si chequean la web del CNE municipio por municipio para ver cuántos de los 335 municipios ganó el PSUV-GPP, cuántos la MUD y cuántos otras opciones, obtendrán lo siguiente:
Es decir, en la tabla se observa que 17.6 millones de venezolanos y venezolanas (el 64.6% de la población) ahora viven en un municipio cuyo alcalde o alcaldesa es del PSUV-GPP. Por contra apenas 9.1 millones (el 33.5%, prácticamente la mitad) lo hacen en un municipio gobernado por la MUD. El resto, medio millón de personas (el 1.9% de la población del país) viven en un municipio cuyo alcalde salió de alianzas que excluyeron tanto al PSUV como la tarjeta unitaria de la MUD.
Un segundo paso para afinar estos datos es desglosar esos 18 municipios que votaron por opciones distintas a PSUV y MUD, según su tendencia política. A pesar de no haber concurrido junto al PSUV, puede tratarse de partidos chavistas, o a pesar de no haber compartido tarjetón con la MUD, puede tratarse de una agrupación antichavista.
En el caso de "otras opciones", lo que hice para decantar la tendencia de esas 18 alcadías fue comparar el comportamiento de la lista ganadora con su propio comportamiento en otros municipios, para ver -a tenor de sus alianzas habituales- si su tendencia es chavista, opositora o "indeterminada/independiente"). De esos 18 municipios obtuve que:
De esta manera, podríamos concluir que de los 335 municipios, ahora 253 de ellos tienen alcaldes o alcaldesas de tendencia bolivariana (75.5% del total de municipios), 78 de tendencia opositora (23.3%) y apenas 4 (1.2%) de tendencias no alineadas, dato para los analistas que esta semana anunciaban un (mal) supuesto "cansancio de venezolanas y venezolanos con la polarización chavismo-antichavismo".
Si ahora recalculamos los datos de población por municipio según su tendencia política -chavista, antichavista o independiente- veremos que los datos no varían drásticamente:
Con esto se derriban varios mitos, principalmente ese de que el chavismo sólo tiene fuerza en lugares poco poblados y la MUD en mega centros urbanos. Si eso es así, ¿cómo puede ser que casi 18 millones de venezolanos tienen alcalde bolivariano a raíz del 8D, es decir casi el doble que el número de habitantes de municipios con alcalde opositor?
Es decir, la MUD presume de que ellos ganaron en municipios más poblados, por tanto tendrán más influencia, pero esto es real en casos puntuales. El total nacional desmiente completamente dicha hipótesis. No sólo que es un argumento con profundo tufo clasista y racista ("ustedes tienen más municipios, pero de campesinos", como si eso fuera malo), sino que en el total nacional dicha consolación dista mucho de ser real.
La actual fuerza del Gobierno Bolivariano a nivel local/regional se hace más patente si realizamos unas cuentas similares en cuanto a las gobernaciones, que se eligieron hace un año, el 16 de diciembre de 2012. ¿Cuántos venezolanos y venezolanas viven en un municipio gobernado por la oposición? ¿Y cuántos viven en un Estado con gobernador bolivariano? Teniendo en cuenta que sólo Lara, Miranda y Amazonas están gobernados a nivel estadal por la oposición, es fácil calcular que el resto de Estados tiene gobernador bolivariano: es decir, 20.685.362 de venezolanos y venezolanas viven en un Estado bolivariano (el 81.8% de la población) mientras que apenas 4.596.512 venezolanos y venezolanas viven en un Estado con gobernador opositor, el 18.2% de la población del país. Nótese que excluyo de este cálculo el Municipio Libertador de Caracas (Distrito Capital), por ser un cargo no electoral. Representado gráficamente:
Así comprobamos que si la fuerza de la Revolución a nivel municipal ya es grande, a nivel estadal es todavía mayor: mientras que el 65.8% de la población venezolana vive en un municipio bolivariano, todavía más venezolanos y venezolanas, el 81.2%, vive en un Estado del mismo signo político.
Finalmente, si combinamos ambas expresiones del poder local (a nivel municipal y a nivel regional) se obtiene una verdadera expresión de la actual configuración del poder local/regional a lo largo y ancho del país, después de las elecciones de diciembre de 2012 y 2013. La pregunta que nos hacemos es: ¿cuántas personas en Venezuela viven en un municipio bolivariano y al mismo tiempo en un Estado bolivariano? ¿Y cuántas personas en Venezuela viven en un municipio opositor y al mismo tiempo en un Estado gobernado por la MUD? Lógicamente un tercer grupo de venezolanas y venezolanos viven en zonas cruzadas: o bien municipio bolivariano perteneciente a un Estado opositor, o bien municipio opositor perteneciente a un Estado bolivariano. Si sacamos cuentas, nos resulta la siguiente tabla:
En la tabla anterior observamos que nada más y nada menos que el 54.7% de la población venezolana vive tanto en un municipio como en un Estado gobernados por el PSUV-GPP, mientras que apenas el 9.7% de la población vive tanto en un municipio como en un Estado gobernado por la MUD. El resto, 35.6% vive en zonas cruzadas: o bien en un municipio gobernado por la MUD pero perteneciente a un Estado gobernado por el PSUV-GPP (27.1%) o bien un municipio gobernado por el PSUV-GPP perteneciente a un Estado donde gobierne la MUD (8.5%).
Nótese que en el cálculo anterior volví a excluir el Distrito Capital, por no tratarse de una gobernación electoral, sino designada por el Presidente de la República, por ser la sede del gobierno central. Si se incluyera, el resultado sería aún más favorable numéricamente a la Revolución.
Si a los números anteriores, que solo incluyen los municipios ganados o bien por el PSUV-GPP o bien por la MUD, añadimos los partidos disidentes según su simpatía respecto a la Revolución, los datos no varían apenas:
Los datos y gráficas de todo el artículo nos muestran que tras los dos últimos procesos electorales regionales de diciembre de 2012 y 2013, la realidad es que:
Por el lado de la Revolución, lo más importante es no dormirse en los laureles, seguir avanzando y corrigiendo fallas, aprovechando la oportunidad que nos presenta el mapa político actual. No podemos olvidar que el resultado de estas municipales fue ligeramente peor que el de 2008, cosa lógica teniendo en cuenta la desaparición física de Chávez, la construcción de un nuevo liderazgo en torno a Maduro, etc., pero que a pesar de ser perfectamente excusable nos debe a llevar a reflexionar el por qué de esos pocos espacios perdidos, o el por qué de esa incapacidad para recuperar territorios que ya son casi "coto privado" de la MUD, como Maracaibo o el municipio Sucre del Estado Miranda, que incluye Petare, ambas a pesar de la desastrosa gestión opositora.
Tras los tambaleantes meses que siguieron a la siembra de nuestro Comandante, y una vez reafianzada la Revolución tanto a nivel del poder ejecutivo, legislativo y otros órganos de poder como gobernaciones y alcaldías, ahora tiene que llegar el momento de entrompar definitivamente y de forma irreversible el desafío más grande: el establecimiento real y efectivo del Poder Popular.
Tenemos todo para hacerlo. Es ahora o nunca. Si no lo hacemos, la Historia, el pueblo venezolano y otros muchos pueblos que miran hacia acá con esperanza, nunca nos lo perdonarán.
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NOTA SOBRE LA METODOLOGÍA: Este artículo se hizo en base a los resultados publicados por el CNE en su web, y tomando el Censo 2011 publicado por el INE en la suya. No especifiqué todos los cálculos uno por uno por lo largo y engorroso de los mismos, y para no enredar el artículo con demostraciones matemáticas, prefiriendo ir lo más directo al grano posible. No obstante quien tenga dudas o haya apreciado algún error que haya podido cometer en mis cálculos o razonamientos, lo que no descarto, que comente en el artículo y haré lo posible por resolverlas por esta misma vía.
Por otro lado, algunas personas habrán notado que no incluí ni la Alcaldía Mayor de Caracas ni la del Alto Apure en los cálculos. Esto se debió a que las mismas distorsionaban los cálculos, dando "doble presencia" a una parte de la población respecto a la otra (quienes viven en esas zonas tienen dos alcaldes en lugar de uno, como el resto del país, y por tanto aparecerían dos veces como población, una por cada alcalde, lo que evidentemente no sería justo ni correcto). Esa omisión no distorsiona gravemente los resultados -más bien su presencia sería la que los distorsionaría, y además haría más complejos de calcularlos y explicarlos- y cualquiera que quiera incluirlos no tiene más que añadirlos a partir de lo expuesto en el artículo.
Desde que se dieron los resultados oficiales, la oposición viene diciendo -y no es la primera vez que usan este débil argumento- que el gobierno ganó en más municipios, pero ellos ganaron donde vive más gente. ¿Qué tan cierto es esto? Es decir, después del resultado electoral del 8D ¿cuántas venezolanas y venezolanos viven en un municipio gobernado por la Revolución? ¿Y cuántos viven en municipios con alcaldías opositoras?
Si chequean la web del CNE municipio por municipio para ver cuántos de los 335 municipios ganó el PSUV-GPP, cuántos la MUD y cuántos otras opciones, obtendrán lo siguiente:
- PSUV-GPP obtuvo la victoria en 242 municipios.
- MUD obtuvo la victoria en 75 municipios.
- Otras opciones obtuvieron la victoria en 18 municipios.
Entidad Federal | Población de municipios gobernados por PSUV-GPP | Población de municipios gobernados por MUD | Población de municipios gobernados por OTROS |
Distrito Capital | 1943901 | 0 | 0 |
Amazonas | 33900 | 112580 | 0 |
Anzoátegui | 1408670 | 61077 | 0 |
Apure | 358900 | 100125 | 0 |
Aragua | 1468603 | 123131 | 38574 |
Barinas | 340622 | 435516 | 40126 |
Bolívar | 1175990 | 170125 | 67000 |
Carabobo | 1091748 | 1153996 | 0 |
Cojedes | 323165 | 0 | 0 |
Delta Amacuro | 135970 | 0 | 29555 |
Falcón | 818500 | 78828 | 5519 |
Guárico | 548917 | 161519 | 37303 |
Lara | 503541 | 1271326 | 0 |
Mérida | 305221 | 514307 | 9064 |
Miranda | 1567208 | 1022286 | 85671 |
Monagas | 353559 | 542259 | 9625 |
Nueva Esparta | 280991 | 210619 | 0 |
Portuguesa | 745953 | 17623 | 112920 |
Sucre | 827220 | 69071 | 0 |
Táchira | 278189 | 890719 | 0 |
Trujillo | 415325 | 179587 | 91455 |
Yaracuy | 600852 | 0 | 0 |
Zulia | 1709309 | 1995095 | 0 |
Vargas | 352920 | 0 | 0 |
TOTAL | 17589174 | 9109789 | 526812 |
% | 64.6 | 33.5 | 1.9 |
Es decir, en la tabla se observa que 17.6 millones de venezolanos y venezolanas (el 64.6% de la población) ahora viven en un municipio cuyo alcalde o alcaldesa es del PSUV-GPP. Por contra apenas 9.1 millones (el 33.5%, prácticamente la mitad) lo hacen en un municipio gobernado por la MUD. El resto, medio millón de personas (el 1.9% de la población del país) viven en un municipio cuyo alcalde salió de alianzas que excluyeron tanto al PSUV como la tarjeta unitaria de la MUD.
Un segundo paso para afinar estos datos es desglosar esos 18 municipios que votaron por opciones distintas a PSUV y MUD, según su tendencia política. A pesar de no haber concurrido junto al PSUV, puede tratarse de partidos chavistas, o a pesar de no haber compartido tarjetón con la MUD, puede tratarse de una agrupación antichavista.
En el caso de "otras opciones", lo que hice para decantar la tendencia de esas 18 alcadías fue comparar el comportamiento de la lista ganadora con su propio comportamiento en otros municipios, para ver -a tenor de sus alianzas habituales- si su tendencia es chavista, opositora o "indeterminada/independiente"). De esos 18 municipios obtuve que:
- 11 son alcaldías de simpatía revolucionaria (ganadas por listas encabezadas por Partido Comunista de Venezuela, Movimiento Electoral del Pueblo, Tupamaro, Vanguardia Bicentenaria Republicana, Juan Bimba, Joven o Psoev).
- 3 alcaldías son de simpatía opositora (dos del Movimiento Al Socialismo -sí, a pesar del nombre suelen ir junto a la MUD- y otra de Voluntad Popular).
- 4 alcaldías son de carácter independiente o no alineado abiertamente, dado que en ninguna o en contadísimas ocasiones comparten tarjeta con PSUV-GPP o MUD (Mopivene, Unidos por Monagas, Progresistas Independientes de Mérida y Poder Laboral).
De esta manera, podríamos concluir que de los 335 municipios, ahora 253 de ellos tienen alcaldes o alcaldesas de tendencia bolivariana (75.5% del total de municipios), 78 de tendencia opositora (23.3%) y apenas 4 (1.2%) de tendencias no alineadas, dato para los analistas que esta semana anunciaban un (mal) supuesto "cansancio de venezolanas y venezolanos con la polarización chavismo-antichavismo".
Si ahora recalculamos los datos de población por municipio según su tendencia política -chavista, antichavista o independiente- veremos que los datos no varían drásticamente:
- Las candidaturas identificadas con la Revolución se impusieron en 253 municipios a lo largo de todo el país, lo que supone que 17.899.412 millones de venezolanos tendrán un alcalde o alcaldesa bolivariano. Un total del 65.8% de la población.
- Las candidaturas opuestas al proceso revolucionario se impusieron en 78 alcaldías, y gobernarán a nivel municipal sobre 9.261.928 habitantes, lo que se corresponde al 34.0% de la población venezolana.
- Las candidaturas que no se identifican ni oponen al Gobierno Bolivariano se hicieron con cuatro alcaldías, que cubren el 0.2% de la población nacional, es decir 64.435 venezolanos y venezolanas.
Con esto se derriban varios mitos, principalmente ese de que el chavismo sólo tiene fuerza en lugares poco poblados y la MUD en mega centros urbanos. Si eso es así, ¿cómo puede ser que casi 18 millones de venezolanos tienen alcalde bolivariano a raíz del 8D, es decir casi el doble que el número de habitantes de municipios con alcalde opositor?
Es decir, la MUD presume de que ellos ganaron en municipios más poblados, por tanto tendrán más influencia, pero esto es real en casos puntuales. El total nacional desmiente completamente dicha hipótesis. No sólo que es un argumento con profundo tufo clasista y racista ("ustedes tienen más municipios, pero de campesinos", como si eso fuera malo), sino que en el total nacional dicha consolación dista mucho de ser real.
La actual fuerza del Gobierno Bolivariano a nivel local/regional se hace más patente si realizamos unas cuentas similares en cuanto a las gobernaciones, que se eligieron hace un año, el 16 de diciembre de 2012. ¿Cuántos venezolanos y venezolanas viven en un municipio gobernado por la oposición? ¿Y cuántos viven en un Estado con gobernador bolivariano? Teniendo en cuenta que sólo Lara, Miranda y Amazonas están gobernados a nivel estadal por la oposición, es fácil calcular que el resto de Estados tiene gobernador bolivariano: es decir, 20.685.362 de venezolanos y venezolanas viven en un Estado bolivariano (el 81.8% de la población) mientras que apenas 4.596.512 venezolanos y venezolanas viven en un Estado con gobernador opositor, el 18.2% de la población del país. Nótese que excluyo de este cálculo el Municipio Libertador de Caracas (Distrito Capital), por ser un cargo no electoral. Representado gráficamente:
Así comprobamos que si la fuerza de la Revolución a nivel municipal ya es grande, a nivel estadal es todavía mayor: mientras que el 65.8% de la población venezolana vive en un municipio bolivariano, todavía más venezolanos y venezolanas, el 81.2%, vive en un Estado del mismo signo político.
Finalmente, si combinamos ambas expresiones del poder local (a nivel municipal y a nivel regional) se obtiene una verdadera expresión de la actual configuración del poder local/regional a lo largo y ancho del país, después de las elecciones de diciembre de 2012 y 2013. La pregunta que nos hacemos es: ¿cuántas personas en Venezuela viven en un municipio bolivariano y al mismo tiempo en un Estado bolivariano? ¿Y cuántas personas en Venezuela viven en un municipio opositor y al mismo tiempo en un Estado gobernado por la MUD? Lógicamente un tercer grupo de venezolanas y venezolanos viven en zonas cruzadas: o bien municipio bolivariano perteneciente a un Estado opositor, o bien municipio opositor perteneciente a un Estado bolivariano. Si sacamos cuentas, nos resulta la siguiente tabla:
Dependencia Federal | Población en MUNICIPIO Y ESTADO PSUV-GPP | Población en MUNICIPIO MUD Y ESTADO PSUV-GPP | Población en MUNICIPIO Y ESTADO MUD | Población en MUNICIPIO PSUV-GPP Y ESTADO MUD |
Distrito Capital | No procede | No procede | No procede | No procede |
Amazonas | 0 | 0 | 112580 | 33900 |
Anzoátegui | 1408670 | 61077 | 0 | 0 |
Apure | 358900 | 100125 | 0 | 0 |
Aragua | 1468603 | 123131 | 0 | 0 |
Barinas | 340622 | 435516 | 0 | 0 |
Bolívar | 1175990 | 170125 | 0 | 0 |
Carabobo | 1091748 | 1153996 | 0 | 0 |
Cojedes | 323165 | 0 | 0 | 0 |
Delta Amacuro | 135970 | 0 | 0 | 0 |
Falcón | 818500 | 78828 | 0 | 0 |
Guárico | 548917 | 161519 | 0 | 0 |
Lara | 0 | 0 | 1271326 | 503541 |
Mérida | 305221 | 514307 | 0 | 0 |
Miranda | 0 | 0 | 1022286 | 1567208 |
Monagas | 353559 | 542259 | 0 | 0 |
Nueva Esparta | 280991 | 210619 | 0 | 0 |
Portuguesa | 745953 | 17623 | 0 | 0 |
Sucre | 827220 | 69071 | 0 | 0 |
Táchira | 278189 | 890719 | 0 | 0 |
Trujillo | 415325 | 179587 | 0 | 0 |
Yaracuy | 600852 | 0 | 0 | 0 |
Zulia | 1709309 | 1995095 | 0 | 0 |
Vargas | 352920 | 0 | 0 | 0 |
TOTAL | 13540624 | 6703597 | 2406192 | 2104649 |
% | 54.7 | 27.1 | 9.7 | 8.5 |
En la tabla anterior observamos que nada más y nada menos que el 54.7% de la población venezolana vive tanto en un municipio como en un Estado gobernados por el PSUV-GPP, mientras que apenas el 9.7% de la población vive tanto en un municipio como en un Estado gobernado por la MUD. El resto, 35.6% vive en zonas cruzadas: o bien en un municipio gobernado por la MUD pero perteneciente a un Estado gobernado por el PSUV-GPP (27.1%) o bien un municipio gobernado por el PSUV-GPP perteneciente a un Estado donde gobierne la MUD (8.5%).
Nótese que en el cálculo anterior volví a excluir el Distrito Capital, por no tratarse de una gobernación electoral, sino designada por el Presidente de la República, por ser la sede del gobierno central. Si se incluyera, el resultado sería aún más favorable numéricamente a la Revolución.
Si a los números anteriores, que solo incluyen los municipios ganados o bien por el PSUV-GPP o bien por la MUD, añadimos los partidos disidentes según su simpatía respecto a la Revolución, los datos no varían apenas:
- 13.823.347 venezolanos y venezolanas viven en un municipio chavista perteneciente a un Estado chavista, es decir el 54.7% de la población del país (recuerden: excluyendo el Distrito Capital).
- 2.464.348 venezolanos y venezolanas viven en un municipio opositor perteneciente a un Estado opositor, es decir el 9.7%.
- 8.929.744 venezolanos y venezolanas, es decir el 35.3%, viven en territorio cruzado: o bien en un municipio opositor perteneciente a un Estado bolivariano (6.797.580, 26.9%) o bien un municipio bolivariano perteneciente a un Estado gobernado por la oposición (2.132.164, 8.4%).
- El resto, apenas 64.435 mil personas (0,3%) viven en municipios de tendencia independientes, (los cuatro en Estados bolivarianos, por cierto).
Los datos y gráficas de todo el artículo nos muestran que tras los dos últimos procesos electorales regionales de diciembre de 2012 y 2013, la realidad es que:
- 2 de cada 3 venezolanos y venezolanas tienen alcaldesa o alcalde bolivariano.
- 4 de cada 5 venezolanos y venezolanas viven en un Estado bolivariano.
- 1 de cada 2 venezolanos y venezolanas viven en territorio rojo rojito, tanto a nivel municipal como estadal. Apenas 1 de cada 10 venezolanos y venezolanas viven en territorio gobernado por la oposición tanto a nivel municipal como estadal.
Por el lado de la Revolución, lo más importante es no dormirse en los laureles, seguir avanzando y corrigiendo fallas, aprovechando la oportunidad que nos presenta el mapa político actual. No podemos olvidar que el resultado de estas municipales fue ligeramente peor que el de 2008, cosa lógica teniendo en cuenta la desaparición física de Chávez, la construcción de un nuevo liderazgo en torno a Maduro, etc., pero que a pesar de ser perfectamente excusable nos debe a llevar a reflexionar el por qué de esos pocos espacios perdidos, o el por qué de esa incapacidad para recuperar territorios que ya son casi "coto privado" de la MUD, como Maracaibo o el municipio Sucre del Estado Miranda, que incluye Petare, ambas a pesar de la desastrosa gestión opositora.
Tras los tambaleantes meses que siguieron a la siembra de nuestro Comandante, y una vez reafianzada la Revolución tanto a nivel del poder ejecutivo, legislativo y otros órganos de poder como gobernaciones y alcaldías, ahora tiene que llegar el momento de entrompar definitivamente y de forma irreversible el desafío más grande: el establecimiento real y efectivo del Poder Popular.
Tenemos todo para hacerlo. Es ahora o nunca. Si no lo hacemos, la Historia, el pueblo venezolano y otros muchos pueblos que miran hacia acá con esperanza, nunca nos lo perdonarán.
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NOTA SOBRE LA METODOLOGÍA: Este artículo se hizo en base a los resultados publicados por el CNE en su web, y tomando el Censo 2011 publicado por el INE en la suya. No especifiqué todos los cálculos uno por uno por lo largo y engorroso de los mismos, y para no enredar el artículo con demostraciones matemáticas, prefiriendo ir lo más directo al grano posible. No obstante quien tenga dudas o haya apreciado algún error que haya podido cometer en mis cálculos o razonamientos, lo que no descarto, que comente en el artículo y haré lo posible por resolverlas por esta misma vía.
Por otro lado, algunas personas habrán notado que no incluí ni la Alcaldía Mayor de Caracas ni la del Alto Apure en los cálculos. Esto se debió a que las mismas distorsionaban los cálculos, dando "doble presencia" a una parte de la población respecto a la otra (quienes viven en esas zonas tienen dos alcaldes en lugar de uno, como el resto del país, y por tanto aparecerían dos veces como población, una por cada alcalde, lo que evidentemente no sería justo ni correcto). Esa omisión no distorsiona gravemente los resultados -más bien su presencia sería la que los distorsionaría, y además haría más complejos de calcularlos y explicarlos- y cualquiera que quiera incluirlos no tiene más que añadirlos a partir de lo expuesto en el artículo.
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